miércoles, 23 de diciembre de 2009

El fin del 2009


Esta Navidad y fin de año no podremos ir a visitar tu jardín mi amor. Tu papá y yo nos retiraremos con el fin de hacer un alto en el camino al finalizar este año. ¡Y es que hemos vivido tanto en el 2009 gracias a vos, que no dejamos de analizar el impacto que tuviste en nuestras vidas!


En este 2009, vimos tu cara mi princesa y nuestra vida cambió para siempre. En este 2009, tuvimos que llevarte al jardín y conocimos el dolor de verdad.


Mi preciosa, no importa en qué parte del mundo estemos tu papá y yo, siempre, siempre te llevaremos en el alma.


Adiós 2009, gracias por darnos a nuestra primera y amada hija Raquel.

lunes, 21 de diciembre de 2009

Entregar a mi hija



Los días de Navidad se han tornado como lanzas que atraviesan mi corazón. Este tiempo de felicidad para muchos, ha sido para mí un espacio de reflexión.

Ayer un buen amigo sacerdote me recomendó que para continuar con el proceso de duelo sano, debía de entregar a mi hija al Señor. Decirle a Dios que ahí estaba mi niña, que se la daba.

Entregar a Raquel al pasado, despedirme de ella como quien cierra un libro, luego de una lectura muy intensa, es la situación más difícil que haya tenido que enfrentar, luego de su muerte.

Hoy 7 meses después de su partida, todavía le hablo al oído, le digo todo lo que la amo, le cuento cómo estuvo mi día, de mis anhelos, mis sueños, mis miedos.

Si alguien sabe cómo se entrega un hijo, ¿podría enseñarme, podría indicarme qué debo hacer? Mi cerebro solo entiende que ella se fue de esta vida, pero no de mi corazón.

Hoy debo decir que no tengo armas para para entregarla. Hoy solo quiero amar su recuerdo, atesorarlo y mantenerlo vivo dentro de mi alma.

jueves, 10 de diciembre de 2009

7 meses de ausencia


Mi amada princesa, partiste hace 7 meses y mamá lleva tu recuerdo en la sangre. He reflexionado tanto acerca de la vida y la muerte, acerca de lo que debe ser realmente importante en mi vida, acerca de la fuerza y la luz intensa que me dejaste.


Hoy, tantos días después de ese momento tan pavoroso, en el que te perdimos físicamente, siento paz en mi alma, porque te dimos mi amor, todo lo que pudimos, te dimos nuestro corazón, te entregamos cada minuto de nuestra vida, mientras estuviste en mi vientre y los 5 días que viviste fuera de mi útero.


Amor de mi vida, tal vez nunca leerás estas palabras, pero de lo que sí estoy segura, es que tenemos una conexión intensa y así te das cuenta de todo lo que siento. Gracias por ser mi bebé para siempre. TE AMO.

jueves, 3 de diciembre de 2009

Naciste hace 7 meses


Mi bella princesita, hoy hace 7 meses llegaste a este mundo y fuimos los papás más felices. Te amo mucho y espero que algún día te pueda abrazar nuevamente.

Hoy mi corazón te continúa llorando. Tu papi y yo te extrañamos profundamente.

Sé que nos volveremos a ver.