jueves, 9 de diciembre de 2010

Hoy hace 19 meses


Han pasado 19 meses desde aquel día en que nos despedimos mi amor y hoy te siento en mis venas más viva que nunca. Con el ambiente navideño todo es alegría en la calle. Las lucen tintinean, las familias cargan sus árboles hasta sus casas, se celebran fiestas por donde se mire. Mi Pequeñita, debo contarte que en medio de toda esa alegría allá afuera, de nuevo me estoy levantando y que debo hacer mi mejor esfuerzo para que esta Navidad nos traiga esperanza a tu papá y a mí. Debemos luchar Raquelita, ayúdame a luchar... Te amaré siempre. Mamá.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

La esperanza quiere huir


Nuevamente, una espada ha traspasado mi corazón. Como se evapora el agua al caer en tierra ardiente, así se evaporó una vez más mi esperanza.


Raquel. amor de mi vida, si estuvieras hoy aquí, mi cristal sería otro, mi existencia tendría tu sello, puro, maravilloso, angelical. Pero el hubiera no existe, solo es un fantasma que de nuevo me atormenta.


Un peso muy grande cae sobre mis hombros, trato de erguirme, pero no alcanzo a levantar mi cabeza. El futuro es tan incierto, que ni siquiera vale la pena pensar en él y en el presente no hay respuestas, nunca existieron, pareciera que se esconden a mi mente racional.


Hoy se me ha ido otro hijo o hija, esta vez tan pequeño que no puedo nombrar su sexo, pero tan grande, como si se hubiera anidado en mi vientre por 9 meses.


Mi amado bebé, ahora estás con tu hermanita y no voy a mentir, me dan ganas de ir también. Me detiene el gran amor que le tengo a Jesús y por supuesto a mi compañero de camino, ese que se ha enjugado las lágrimas, con el que he llorado hasta los huesos la ausencia de nuestros hijos.


La esperanza se empeña en dejarme, mientras yo me abrazo a ella, temerosa de que se vaya para siempre.

domingo, 15 de agosto de 2010

Mi hija ha muerto y yo sigo siendo su madre


Mi pequeña hija ha muerto y hoy es el día de la madre. Mientras mi corazón trata de mantenerse en calma, miro para todos lados y lo único que puedo divisar son las ofertas baratas que los comercios se empeñan en ofrecer, con el fin de comprar el amor de esas mujeres que, sí ciertamente, han dado parte de su vida por esos hijos.


Han pasado 15 meses desde ese maravilloso momento en el que me convertí en la madre de Raquel Castillo Chinchilla, 2350 gramos de amor, 43 centímetros de gran ternura,¡una belleza!. Su muerte marcó mi alma para siempre, ¡soy una madre diferente!
Este 15 de agosto, por más que intento pensar en que todos los días, son para celebrar a las madres, que esta fecha no debe hacerme sentir triste... no lo he logrado.


Hoy visité a mi mami, Odilié Morera, una mujer muy valiente, amorosa y solidaria. De ella aprendí que la humildad te enaltece y que la sinceridad es, sin duda, una virtud. También compartí con mis hermanos, mi cuñada y mis sobrinos, cuatro preciosos niños a los que amo, pero que, al mismo tiempo me recuerdan que no puedo abrazar a mi Raquel, sino en mis sueños, en mi mente.


En misa, el sacerdote invitó a las madres a ponerse de pie para orar por ellas y no pude hacerlo, ¡soy una madre, sí, pero distinta!


En este día cuando todas madres reciben regalos materiales, quiero compartir este relato y desearle a todas las mamis de niños en el cielo, mucha paz interior, este y todos los días. Admiro su valentía para continuar viviendo, con este dolor en el corazón.


Ellas y yo compartimos la maravillosa sensación de ser la madre de un ángel en el cielo.


¡Paz y amor para nuestros corazones, hoy y siempre!






domingo, 8 de agosto de 2010

Carta a Raquel





¡Parece mentira, pero ya han pasado 15 meses desde que te fuiste físicamente. Mi amada Raquel! Te esperaba desde siempre y cuando llegaste, mi vida se llenó de esa sensación maravillosa que significa ser la mamá de un ángel.



Mi amor, mamá se ha ido recuperando lentamente y hoy me siento más fuerte. Tanto, que tu papi y yo estamos pensando en intentar traer a tu hermanito (a). Ayúdame mi amor, dame fuerzas desde donde te encuentres. Algunas veces mi corazón duele tanto por tu ausencia, que no sé si seré tan fuerte para vivir entre la alegría de una nueva vida en mi vientre y el profundo dolor de tu ausencia.



Hoy a 15 meses de tu partida, te extrañamos con toda nuestra alma. Siempre serás nuestra princesa amada, nuestra primera hija, la niña de nuestros ojos, la pequeña que nos enseñó el amor verdadero.



Te amamos, papá y mamá.

sábado, 3 de julio de 2010

El amor y la vida


Hoy es 3 de julio, hace 14 meses nació mi Sol. Recuerdo que, cuando estaba en la sala de recuperación, no podía dormir, aún con la anestesia y cada 5 minutos hacía al enfermero llamar a la Neonatología, para saber cómo evolucionaba Raquel. Me decían, "señora está bien, no se preocupe"...


Nuestros amigos Carlos y Carol dicen que "mientras siga brotando el amor la vida siempre existirá", yo creo que es cierto y lo sé, porque el amor hacia Raquel es tan inmenso, que ella sigue viva, en el corazón de sus papás y en el de muchos otros corazones, pero además, porque hoy el amor más intenso se hizo presente de nuevo.
Mi sobrino y ahijado Franco Chinchilla Jenkins, nació el pasado 1 de julio y hoy estuvo entre mis brazos por primera vez. ¡Es bello, precioso! Su maravillosa presencia ilumina todo nuestro entorno. Sin embargo, esta tarde, mientras el alba de la vida de Franco, apenas asomaba sus más increíbles colores, mi esposo y yo extrañábamos desde lo más profundo de nuestra a alma, a la niña que nos robó el corazón hace poco más de un año.
¡Bienvenido mi amor!, ¡bienvenido mi niño hermoso!, me hubiera encantado que conocieras a Raquel, que jugaras con ella y que fueran amiguitos. Alguna vez te explicaré cómo la vida escribió otra historia.

sábado, 8 de mayo de 2010

Me siento en paz


Hoy por fin cumplí la promesa que le hiciera a mi hija, meses después de su muerte. Ernesto y y yo organizamos una misa de Gloria en honor a nuestra Princesa en donde participaron, nuestros familiares y amigos.
Carlos y Carol Castro Garro, las voces de Eolian, nos hicieron el honor de cantar en la misa y nuestro entrañable amigo el Padre Cuyo, ofició la ceremonia.
¡Cuanto amor sentimos mi esposo y yo durante esa hora!, pudimos presenciar una muestra viva de la fuerza de Dios hablando, mediante las expresiones de cariño de los amigos allí presentes.
Queremos darles las gracias a todos aquellos que se tomaron el tiempo hoy, para decirnos "aquí estamos", a los que nos acompañaron con sus pensamientos y a todos aquellos que nos han acompañado en este año de dolor.
Puedo decirles que escribo esta líneas en paz. Realmente hoy por la mañana mientras Carol cantaba, "porque no hay dolor que traiga consigo el abrazo y el consuelo de Dios", el viento soplaba con fuerza y sentí que era Él diciendo "acá estoy, no se preocupen que los estoy abrazando con inmenso amor".
Hija , sé perfectamente que nunca leerás estas letras, que si te escribo es impulsada por el amor de madre que te mantiene viva en mi corazón. Sin embargo, hoy, en medio de la conmemoración de tu muerte física, es necesario que te diga que gracias a vos, voy a vivir plenamente mis días, uno a uno, porque me enseñaste que debo tener fuerza para continuar.

A un año de tu muerte Raquel, mamá está en paz.

Te amaré siempre.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Destilando tristeza


Hoy realmente me siento triste. Y es normal...luego de un año de dolor, estoy viviendo minuto a minuto en mi mente, la enfermedad que llevó a Raquel hasta la muerte. ¡Por Dios! ¿será posible que algún día esta ausencia tan grande que ella ha dejado sea más llevadera?

He repasado tantas veces esta historia, hoy ya no busco culpables o respuestas a los porqué, solo oro a Jesús por paz interior.

Le doy gracias a Dios, porque Ernesto y yo, durante este año nos hemos unido, corazón a corazón, para soportar a este dolor tan grande de haberla perdido físicamente.

Mi pequeña Raquel vive en mí todos los días, su muerte no ha podido eliminarla de la historia, ella vivirá por siempre porque, el amor por una hija es inmortal.

lunes, 3 de mayo de 2010

El año más largo de mi vida




Te amo mi amor y te extraño con toda mi alma, hoy que estarías cumpliendo un año. En este momento, hace 365 días estabas todavía conmigo. No sabes lo que me duele que hayas muerto.

Te extrañaré por siempre mi princesa.


jueves, 8 de abril de 2010

Nuestro amor persiste


Desde que empezaste a anidarte en mi vientre, mi Pequeña, te convertiste en mi gran amor. Ya han pasado 334 días y mi alma te añora a cada minuto.

Raquel, aunque hoy estoy más tranquila, ¿será posible que me reponga algún día a tu muerte? No lo creo...

Tu ausencia es profunda, es como un abismo que me separa de la vida que antes soñaba y la que ahora tengo que vivir.

Mi ángel, mañana serán 11 meses de tu ausencia física, sin embargo sé que no me has dejado porque vives dentro de mí. Este amor permanecerá por siempre... la muerte no podrá desvanecerlo.


Te ama mamá.

martes, 9 de marzo de 2010

Un soplo


Mi bella Raquel partió hace 10 meses. ¡Parece una eternidad y al mismo tiempo un soplo!

Durante todo este tiempo, he llorado tanto como nunca hubiera imaginado. Al mismo tiempo, he crecido en todos los sentidos.


Mi preciosa bebé, ¡cuánto te extraño, cuándo he añorado sentir tus latidos dentro de mi vientre otra vez!


Sin embargo, hoy me desperté con un sentimiento diferente, pienso que estoy más fuerte y que esa fortaleza te la debo a vos mi ángel.


Durante esos cinco días que viviste, nos enseñaste a papá y a mí, que la vida es una lucha constante, llena de momentos inolvidables como lo fue el verte llegar y desgarradores, como fue tu despedida al cielo.


Te amo hija, te amo como no he amado a nadie en este mundo y te doy gracias porque hoy, a 10 meses de tu partida, conozco el amor verdadero, el amor profundo y maravilloso, el amor que traspasa la barrera de la muerte.


Con amor tu mamá por siempre,


Alejandra.

jueves, 4 de marzo de 2010

Un mal día

Han pasado casi 10 meses de tu partida mi amor, sé que siempre habrán días malos en los cuales no me siento muy bien con respecto a tu partida.....
Hoy fue un día de esos... escribo estas líneas porque siento que lo necesito, en ocasiones paso de sentirme el escudo protector de mi hermana a ser frágil y me derrumbo.... el sentimiento no es nada agradable.
Hoy tuvo la suerte de conocer a Roy, mi nuevo paciente, el nació de un parto prematuro, peso 2100 gramos, tuvo un Apgar muy bueno y con cuatro días de nacido llegó hoy al Ebais de San Antonio de Naranjo.
Al revisarlo no hacía nada mas que tocarle la cabeza y contemplarlo, de pronto volvieron a mi mente las imágenes feas de siempre y todas las preguntas que siempre me hago... y que se no tienen respuesta.
Raque... amor me haces una falta tremenda.
Te quiere tu tío
Manuel.

domingo, 7 de febrero de 2010

Alejandro Víquez Espeleta, el niño de las sonrisas


Éste fue un fin de semana muy especial. Los papás de RENACER compartimos en torno a la conmemoración del aniversario de la partida de Alejandro, el hijo de Federico y Guiselle Víquez Espeleta.

Alejandro fue un niño maravilloso, que vivió con amor, lucha y entrega sus 10 años de vida.

Yo nunca conocí durante ese tiempo a Ale, mi tocayo, sin embargo hoy, realmente, forma parte de mi existencia, así como la de Ernesto.

Ayer sábado acompañamos a sus papás en el jardín donde él descansa, ubicado en el mismo lugar donde se encuentra mi amada Raquel. Vimos fotografías de este precioso niño, enamorado de la vida, de la gente, siempre con una sonrisa en su boca, amante de los caballos y lleno de toneladas de amor para dar.


Hoy participamos de la misa en su honor y notamos cómo se reflejó su esencia, en cada una de las personas que estábamos ahí. Fuimos por amor, un amor tan grande que hace que personas desconocidas nos unamos en torno a Alejandro y sus enseñanzas.

Gracias Ale, por este maravilloso regalo de pureza que nos has dado desde el cielo. Te imagino jugando con nuestra hija y llenándola se ese sentimiento tan transparente que regalabas a todo aquel que veías.



Con amor tu nueva amiga,

Alejandra, la mamá de Raquelita







lunes, 1 de febrero de 2010

El tiempo ha pasado


El tiempo ha pasado y he vuelto a la rutina diaria. Levantarme temprano, salir para el trabajo, tratar de no llegar tarde. Correr durante el día tratando de solucionar el mundo y en la noche, encontrar un rato para mi misma y para mi esposo.


Aunque el mundo caprichoso se empeñe en envolverme poco a poco y alejarme de aquellos momentos de intenso dolor, nada ni nadie puede evitar que mi amada Raquel esté en mi pensamiento. Tan pequeña, tan frágil, tan perfecta...mi amor sin límites, mi hija adorada.


Aunque, las mañanas empiezan a tomar un tinte cotidiano, aunque las noches, parezcan llevarse los hilos del pasado que han estado cosiéndose en mi ser, aunque ahora empiece a reír por alguna chiste que me cuentan...duele cada sonrisa, mi bella Raquel se ha ido y el tiempo ha pasado una espada dentro de mi corazón.

sábado, 30 de enero de 2010

Y el 2010 llegó





Un mes después del inicio de este año, he decidido volver a escribir. Por mes y medio se había cerrado la llave de mis palabras, como si el cansancio cortara mi inspiración. Y es que mi cuerpo y mi mente han resentido tanto dolor al que han sido sometidos.

Este 2010 ha empezado con rezago en mi calendario. Los días han llegado y se han ido, uno a uno, casi sin darme cuenta. Pero aquí estoy ¡viva!, el dolor no me me mató, solo me ha hecho más fuerte y me sigue impulsando a mantenerme erguida, aún las lanzas de la ausencia continuen traspasando mi alma.

Han pasado tantas cosas durante este tiempo. La Navidad y el Año nuevo lo recibimos en tierras caribeñas, en medio de unas personas que apenas conocimos y que, sin embargo, nos dieron todo su amor, cual si fueran viejos conocidos. Este paréntesis en nuestra vida, nos sirvió para interiorizar aún más nuestra realidad y tratar de enfrentarla con valentía.

El amor es el único sentimiento que me ha impulsado a continuar con mi vida, sin un pedazo de mi corazón. El amor inmenso por Raquel, a pesar de su muerte, el amor por Ernesto, mi amado esposo, mi compañero, el amor por mi familia, por los antiguos amigos que no nos dejaron y por mis nuevos y entrañables compañeros de camino, los papás y mamás de RENACER.

Empiezo el 2010 con la premisa de amar a la mayor cantidad de gente presente en mi existencia y con la esperanza de que una ténue alegría pueda llenar nuestros corazones.