jueves, 16 de julio de 2009

Las lágrimas volvieron

Hoy ha sido un día difícil. Después de varios días de una tristeza seca, en la que no pude llorar, acompañada de una relativa tranquilidad, volví a sentir ese ácido dentro del corazón y las lágrimas regresaron.
Por supuesto que esta montaña rusa es parte del estira y encoge que significa el duelo, pero esos cambios emocionales te golpean con fuerza.
También las lágrimas tienen que ver con reconocer una y otra vez, que la muerte de los niños es real.
Ernesto y yo recibimos a una nueva amiga en el dolor, que hace 15 días perdió a su segunda bebé. Ya hace 4 años había pasado por una pena igual cuando murió su primera hija. !Cuánto dolor puede soportar un ser humano! Sin embargo, ella nos enseñó la grandeza de una madre, cuando, a pesar de los grandes dolores, piensa antes que nada en que sus hijas no sufran.
Fue una bendición tenerla en casa.

No queda más que llorar cuando se tenga que llorar y estar serenos cuando el duelo te de un respiro.

3 comentarios:

Eduardo Mena, Papá de Rebeca y Guayo dijo...

Alejandra: Pero es rico llorar cuando es "tiempo de llorar". Con lágrimas de puro amor. No es cierto!!!. Hay una cuadra larga en mi camino al trabajo, por la que siempre pasaba en el carro llorando. Cuando ya estaba cerca ponía la canción "Vuelve" de Alux Nahual, me carboneaba un poco, empezaba a cantarla hasta que el nudo en la garganta ya no me dejaba. Ya hace varios meses que paso por ahí solo recordando lo rico que fue ese tiempo de llorar... Me dio gusto llorar a galillo pegado, como dicen, por una hija tan amada!

Alejandra, mamá de Raquel dijo...

Sí tiene razón es rico llorar,pero duele, duele, duele y duele...
Lo que pasa es que estoy viviendo la montaña rusa de emociones, entonces cuando pasó un día y no lloré a pesar de estar triste hasta la médula, pensé que iban a pasar más días así, pero no duró mucho.
Ya sé, me lo han repetido "esto es así" y debo vivirlo como tal.
Seguiré llorando por mi hija amada, como usted dice.
Saludos.

ManSua dijo...

Las lagrimas no cambian nada pero te alivian el alma